20 Agosto 2015
El Rototom Sunsplash tiene características que hacen que no se trate de un festival más. Una de estas características es la increíble actividad que alberga el recinto desde que abre sus puertas cada día a las 13.00. Pasado el ecuador del festival, es precisamente el momento justo en el que cada una y uno de los asistentes a esta edición ya han encontrado su lugar. Es curioso, pero lo que el primer día eran todo novedades (nueva programación, nuevas áreas, cambios de ubicación,…), ahora se ha convertido en algo cotidiano. La programación marca la agenda diaria y el Rototom Sunsplash se convierte en su particular casa.
Las mañanas son de las playas, no hay duda. Por la tarde todos descansan, recargando pilas: Bajo la cúpula de Vivir la Energía, en las zonas del césped, junto al símbolo de la Peace R(evol)ution de esta edición, en las hamacas del African Village,… Según se acerca la hora, el Foro Social y la Reggae University empiezan a despertar y a dar la bienvenida a los primeros diálogos; otras áreas como RototomCircus, MagicoMundo y Vivir la Energía también se desperezan. Eso sí, si hay una zona que parce que nunca duerme esa es el mercado y comidas.
Es el momento de despertar. En algunas carpas ya suena la música, pero no será hasta dentro de unas horas cuando los escenarios del Rototom se enciendan. Bienvenidos a casa.
Asun Pérez